“Tengo el corazón griego y la mente alemana. Soy una mezcla”, afirma Odysseas Vladochimos (Stuttgart, Alemania; 31 años), portero del Sevilla y un auténtico trotamundos del fútbol europeo. Hijo de padres griegos emigrados a Alemania, su carrera como deportista se forjó en el país germano. Fue internacional en todas las categorías con Alemania e incluso le ganó a España un Europeo sub-21 en 2017. Después de ese triunfo, ante rivales como Dani Ceballos, Saúl, Deulofeu, Bellerín, Oyarzabal y Marcos Asensio, el portero tomó la decisión de jugar con la selección absoluta de Grecia. “Lo hice por mi familia, por ese corazón griego que tengo. Quizás sea un poco más griego que alemán. Fue una decisión difícil”, relata Odysseas en inglés a EL PAÍS en la luminosa mañana del pasado jueves en la ciudad deportiva del Sevilla, antes de recibir este domingo (16.15, Movistar) al Barcelona.En el club andaluz ha caído de pie. Se le nota cómodo y adaptado. Comienza a hablar en español. “Sobre todo con los chicos como Carmona, Víctor e Isaac”, aclara un deportista que domina el alemán, el griego, el portugués y el inglés y que ha sabido sobrevivir a países y Ligas tan distintas como las de Alemania, Grecia, Portugal e Inglaterra. Matías Almeyda, entrenador del Sevilla, confió en los consejos de Antonio Cordón, director deportivo, quien lo fichó aprovechando su falta de oportunidades en el Newcastle. El conjunto inglés lo fichó del Nottingham por 23 millones de euros en el verano de 2024 y solo jugó un partido de la Copa de la Liga inglesa después de apenas siete la campaña anterior. Tras una gran trayectoria en el Benfica, su ostracismo en Inglaterra llamó la atención en los dos últimos cursos. “Son cosas que pasan en el fútbol. Hay diferentes razones y me quedo con las cosas buenas que hay incluso en periodos como ese. He aprendido mucho y nunca dejé de entrenar y trabajar duro para ser mejor. Ahora me siento preparado y todo ese proceso me hizo progresar. Me siento feliz y preparado porque quería volver a sentirme importante”, relata el meta del Sevilla. Y tanto. Almeyda le dio la titularidad hace tres jornadas en Vitoria ante el Alavés y la mantuvo contra el Villarreal y el Rayo. Dos victorias y una derrota han sido los resultados cosechados por su equipo. El portero ha dejado un buen elenco de paradas y una sensación de seguridad que el equipo agradece. “Cuando hablé con la gente del Sevilla ni me lo pensé. Es una gran competición y un gran club. La decisión fue fácil. A mí me gusta el ambiente que se respira en este equipo. Creo que el entrenador lo propicia y ese buen ambiente luego se traslada al césped”, relata Odysseas. El Sevilla, con 10 puntos, capea en el campo gracias a su entrenador y un nuevo grupo de jugadores una delicada situación deportiva e institucional. La llegada de elementos como el guardameta heleno supone un soplo de aire fresco. “Creo que sabemos cuándo divertirnos y cuándo estar serios. Me gusta la atmósfera en la que vive el grupo y eso se refleja luego en los partidos”, reitera Odysseas, quien se hizo futbolista jugando con su hermano Panagiotis, también profesional, escalando en las categorías inferiores del Stuttgart hasta llegar al primer equipo con solo 19 años. Odysseas Vlachodimos, durante la entrevista. PACO PUENTESTras ser relegado de nuevo al filial, decidió marcharse al Panathinaikos junto a su hermano. Dos temporadas en Grecia le abrieron el camino de un grande de Europa, el Benfica. “Es un gran club, sin duda. Tras mi paso por Grecia fue el salto adecuado para jugar partidos internacionales importante y, también, ganar títulos (dos Ligas lusas). Crecí como portero porque me acostumbré a jugar con presión. Y el paso por Portugal me marcó de manera personal. Dos de mis hijos son portugueses y es un país al que le tengo mucho aprecio”, señala. Fue en el Benfica donde Odysseas tuvo la oportunidad de enfrentarse al Barcelona en la Liga de Campeones. Dos partidos en la fase de grupos de la temporada 21-22 en los que no perdió frente al equipo catalán, rival este domingo del Sevilla. El Benfica ganó 3-0 en Lisboa y empató a cero en Barcelona. Ahora llega el reencuentro. “Recuerdo esos dos partidos. Hicimos una buena actuación y ahora llega otro desafío para mí y el Sevilla. Qué puedo decir del Barcelona. Es un gran equipo. Claro. Pero queremos ganar, estamos bien, y el ambiente en nuestro estadio es increíble”, reseña este jugador de mente alemana y corazón griego, templado por el carácter luso y superviviente de la feroz Premier. Un hombre europeo y políglota, que ahora disfruta de Andalucía y de España y que tiene muchas metas por cumplir. Una de ellas es intentar representar a Grecia en el próximo Mundial 2026. “Los dos próximos partidos son muy importantes. Tenemos un equipo que mezcla veteranía y juventud que es capaz de todo. Sería un sueño estar en la Copa del Mundo con Grecia”, indica. Su selección se enfrenta en el próximo parón a Escocia y Dinamarca fuera de casa. En dos partidos, han ganado un choque y han perdido otro. Grecia es tercera del Grupo C con tres puntos. Dinamarca y Escocia tienen cuatro en la primera y la segunda posición. El primero va directo al Mundial y el segundo jugará una repesca.

Odysseas, corazón griego y fiabilidad alemana contra el Barça | Fútbol | Deportes
Shares: