Entre los subgrupos de cáncer de mama se encuentra el triple negativo, una de las variantes más agresivas y de peor pronóstico, debido a que carece de receptores hormonales de estrógeno, progesterona y de la proteína HER2.

Esta característica lo hace menos susceptible a los tratamientos convencionales, como la hormonoterapia o las terapias dirigidas, lo que complica su manejo clínico.

De acuerdo con la Sociedad Mexicana de Salud Pública, el cáncer de mama triple negativo (CMTN) representa entre 10 y 15 por ciento de todos los casos de cáncer de mama a nivel global.

Además, señala que, en América Latina la incidencia de esta enfermedad muestra cifras superiores al promedio mundial, reportando una frecuencia de 21.3 por ciento en Perú; 24.6 por ciento en Venezuela, 23.1 por ciento en México y 27 por ciento en Brasil, lo que revela un patrón preocupante en la región.

Gerardo Castorena, integrante del Comité Científico de la fundación CIMA, en entrevista con El Heraldo de México explicó que:


“El cáncer de mama triple negativo es frecuente en mujeres jóvenes. En promedio, siete de cada 10 casos se presentan antes de los 40 años. Tenemos que romper la idea de que el cáncer de mama sólo afecta a mujeres mayores. El riesgo existe para todas”, dijo.

Las cifras podrían estar relacionadas con factores genéticos característicos de la población latina, así como con desigualdades en el acceso a diagnóstico temprano y tratamientos especializados, que influyen directamente en el pronóstico y la supervivencia. Castorena advierte que:


“50 por ciento de las tragedias ocurre porque las pacientes llegan tarde al médico, y el otro 50 por ciento porque consultan al especialista equivocado. Tenemos que dejar de hablar del cáncer desde el miedo. No es una sentencia, es un reto de salud que, si se enfrenta a tiempo y con los recursos adecuados, se puede superar”, señaló el cirujano oncológico Castorena.

 

MAAZ

 

Shares: