La onda expansiva del sonoro desplante de Vinicius a Xabi Alonso cuando lo sustituyó el domingo en el clásico se fue apagando con el transcurrir de los días hasta que la relación de ambos regresó a un punto de equilibrio público este viernes por la mañana. El entrenador, el único al que el brasileño no mencionó en su disculpa pública del miércoles, apareció temprano en la sala de prensa de la ciudad deportiva de Valdebebas dispuesto a mirar hacia delante, para empezar al partido de este sábado contra el Valencia en el Bernabéu (21.00, Movistar). “El miércoles, después de los dos días de descanso, tuvimos una reunión con todos, con los jugadores, con la plantilla, y Vini estuvo muy bien. Estuvo impecable. Habló desde del corazón, con sinceridad, y yo quedé muy satisfecho. Y desde ese momento para mí el asunto quedó zanjado”, dijo el técnico. “Ninguna represalia”.La dirigencia del club transmitió desde el principio comprensión con el brasileño. “Tiene un pronto que es el que es, pero es un chico con un gran fondo: es bondadoso”, decían fuentes internas tras el clásico. “La vida son lecciones. Lo fue para él, desde luego. Y también para el míster”. La última frase contiene uno de los ingredientes esenciales del conflicto latente que emergió el domingo sobre el césped del Bernabéu.En el palco no se compartió la decisión del técnico de sustituir al brasileño en el minuto 72, con 2-1, cuando consideran que estaba jugando un muy buen partido, según fuentes cercanas. Han tendido más a comprender el disgusto del futbolista con la consideración no incondicional del entrenador. En los despachos, se ve a Vinicius no solo como un jugador determinante en las dos últimas Champions y el último The Best, sino como un activo muy valioso puesto al cuidado del técnico.No olvidan la llamada de Arabia Saudí que recibió hace algo más de un año José Ángel Sánchez, director general del club, en la que le ofrecieron un mínimo de 300 millones de euros por el brasileño, según fuentes conocedoras de la oferta. Los agentes de Vinicius, cuyo contrato vence en junio de 2027, habían mantenido en aquella época varias reuniones con representantes de la liga saudí para explorar las opciones que podían poner a disposición de su cliente. Sirvió para eso y para que el Madrid recibiera una especie de tasación de su estrella. Aunque mantienen que la única opción para venderlo es a cambio de los 1.000 millones que figuran como cláusula de rescisión en su contrato. En cualquier caso, aquella cifra de partida le habría convertido en el traspaso más caro de la historia. Solo Mbappé se acercó a eso, cuando el PSG aceptó en el verano de 2023 una oferta de 300 millones de euros por un movimiento al que se negó el delantero, que se fue un año después gratis al Madrid. Además de rebajar la tensión y mirar hacia delante, Xabi se refirió este viernes a su manera de conducirse como entrenador: “Siendo yo mismo. Lo más importante es ser auténtico, no intentar impostar nada y tener una relación sincera sabiendo cuál es el rol que toca a cada uno. Y siempre pensando en lo mejor para el equipo. Intentar llevar al grupo y tener una buena relación dentro del respeto, dentro de la misma exigencia. Pero sabiendo que no todos son iguales. Tienes que tener esa inteligencia emocional para adaptarte a ellos, teniendo tu posición”.Con Vinicius, muy disgustado desde que supo que si no se hubiera lesionado Trent la mañana del partido habría sido suplente en la semifinal del Mundial de Clubes contra el PSG, optó por el apaciguamiento. “El tema quedó muy bien cerrado. Hablamos muy positivamente y el foco está en el campo”, dijo. “Le veo muy centrado. Le veo con muchas ganas. El otro día [por el clásico] jugó muy buen partido. También contra la Juve y contra el Getafe. Y esperamos lo mismo para mañana”. El brasileño también se encuentra más tranquilo después de las conversaciones y de las palabras públicas de su entrenador, según fuentes de su entorno. Por ahora han salvado el equilibrio.

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